Las Caderechas: El valle de las cerezas de Burgos
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- Publicado: Lunes, 15 Julio 2013 12:28
- Escrito por Super Usuario
Las Caderechas: El valle de las cerezas de Burgos
La especial dedicación del cultivo de cerezos ofrece una calidad fantástica en tamaño y sabor, reconocida con la Marca de Garantía
La provincia de Burgos, tan fría como histórica, tiene unos fértiles valles donde se desarrollan cultivos que parecen de otras latitudes y que surgen ahora con más renombre que nunca. El Valle de las Caderechas, al norte de Burgos, a 50 km de la capital, entre Poza de la Sal y Oña, dedica una buena parte de su territorio a la producción de “exquisitas frutas” desde hace al menos 10 siglos, según documentos del Monasterio de San Salvador de Oña. Sin embargo, a pesar de su ancestral fama no es hasta ahora cuando empiezan a darse a conocer al gran público a través de las principales cadenas de distribución.
Las marcas de garantía
La calidad y la singularidad de las cerezas y manzanas reinetas del Valle de Las Caderechas están reconocidas por sendas Marcas de Garantía, concedidas por el Instituto Tecnológico Agrario de la Junta de Castilla y León en 2004. Estos distintivos aseguran que las cerezas y manzanas reinetas han sido cultivadas, recolectadas y comercializadas cumpliendo unos exigentes parámetros de calidad y respeto al medio ambiente.
Estas marcas de calidad certificada se rigen por un Reglamento de Uso que define las prácticas de producción permitidas y cuyo cumplimiento es inspeccionado por parte de los técnicos de las mismas. Anualmente una entidad de certificación realiza la auditoría del sistema de control. Estos requisitos y controles avalan ante los consumidores que las cerezas y las manzanas reinetas amparadas por las Marcas de Garantía son un producto de gran calidad, respetuoso con el medio ambiente y con cualidades bien diferenciadas. La tradicional fama de las cerezas y reinetas de Las Caderechas incorpora así un control y una certificación que otorgan un valor añadido a estas frutas tan apreciadas desde hace siglos.
Los consumidores tienen a su disposición un producto certificado, con garantía de calidad y de origen, que cumple exigentes requisitos de producción y que muchos restauradores han convertido en santo y seña de la gastronomía burgalesa.
La cereza más tardía
Las cerezas cultivadas en el Valle de Las Caderechas tienen un sabor y un olor particulares, muy apreciados por el consumidor. Lo que les da ese toque especial es el equilibrio que mantienen entre dulzor y acidez. Son recolectadas a mano y seleccionadas cuidadosamente, descartándose las no cumplen con las características establecidas en el Reglamento de Uso de la Marca de Garantía “Cereza del Valle de Las Caderechas”.
Otra de las características que distinguen a las cerezas del Valle de Las Caderechas es lo tardío de su fecha de recolección. Mientras que en otras regiones fruteras españolas la temporada de recolección se inicia en abril, en Las Caderechas empieza en junio y se prolonga hasta la primera semana de agosto. Así, el valle proporciona cerezas de calidad en un momento en el que el resto de la producción ya ha sido vendida. Esto es posible por el microclima de la zona, por su elevada altitud y por la elección de ciertas variedades de cerezo, que florecen y fructifican más tarde.
Datos de la Producción de Cerezas:
Hectáreas: 50.
Productores: 25.
Almacenistas: 18.
Producción media anual: 200.000 – 250.000 kg.
Variedades: Las más tradicionales y extendidas son la Fresona y la Negra Tardía, que comparten terreno con las variedades Burlat, Stark Hardy Giant, Summit, Sunburst, Lapins, Rainier, Van y Guinda.
Comercialización: Mercados principales: País Vasco, Burgos y Cantabria.
TEXTO Y FOTOS: CARLOS GARCÍA / LOMEJOR.COM